
Tras pasar 10 días en San Francisco y sus alrededores, una de las mayores concentraciones de talento y negocios incipientes del planeta, he aprendido varias lecciones que espero poner muy pronto en práctica. Seguramente no haga falta irse tan lejos para poder aprenderlas, pero sí que es necesario encontrarse en ese entorno para entender su alcance y por qué allí funcionan cosas que aquí parecen contrarias a nuestra cultura.
– El focus: Llámalo como quieras -enfoque, foco, concentración-, pero los dos sabemos de lo que estamos hablando. Pon tu focus en tu negocio y no dejes que nadie ni nada te distraiga. No asistas a reuniones improductivas, ni a eventos en los que no tienes muy claro cuál es tu rol y objetivo. No te saltes las fases que sabes que tienes que seguir y permanece atento a tu competencia, al mercado y a tus intuiciones. Sólo tienes una pequeña oportunidad de triunfar si pones el 150% de tu esfuerzo y de tu focus en tu negocio, y recuerda que el conocimiento y la atención son las mejores fuentes de intuición del planeta.
– Las reuniones: Las reuniones se preparan con agendas claras y objetivos cuantificables. Nada de “nos vemos y ya te cuento”. Nada de sorpresas. Antes de entrar, los participantes tienen toda la información necesaria para poder avanzar y tomar decisiones, así que es mejor dejar las sorpresas y las improvisaciones para los conciertos de jazz. Todo esto lo explica muy bien Loïc Le Meur en este post sobre las diferencias entre las reuniones en Francia y EEUU.
– El interés: Durante mi comida con el Profesor Burton Lee, éste reconoció no haber leído ninguno de mis primeros e-mails, porque le resultan excesivamente largos. Pese a ello, por fortuna, conseguí llamar su atención, pero no siempre es así. Asuntos importantísimos se despachan en e-mails que pueden leerse en una pantalla de blackberry sin scroll. Nunca más de tres líneas, lo suficiente para generar interés y convertir la interrupción en una oportunidad. Si no hay interés, no hay mensaje, no hay negocio, no hay nada. Acuérdate de lo que te decían en la carrera: Keep It Short & Simple (KISS). El detalle es la recompensa al interés suscitado.
– La especialización: Al principio, cuando alguien me preguntaba por mi campo de especialización, respondía “internet”. Tardé un par de horas en darme cuenta de que “internet” no es una especialización; ni siquiera “social media”, “SAAS” o “Web services” se considera una especialización. Hay que ser mucho más concreto al decidir tu ámbito de actuación, y sobre todo al expresarlo. Un abogado que sabe de empresas de internet es una especie de ser informe que tapa la luz, a no ser que sepas explicarle que eres un especialista en desarrollo estratégico de nuevos canales para empresas basadas en servicios web, como es mi caso. Esto no quiere decir que no puedas cambiar de sector o de carrera profesional, pero, una vez más, el enfoque determina tu valor en el mercado.
– El mercado: La mayor parte de las startups de Silicon Valley tienen muy claro que su mercado inicial es Estados Unidos. Hablamos de la mayor economía del planeta, con una madurez y penetración de internet muy superior a la de España y de la mayor parte de nuestro entorno. Se trata de un mercado bastante homogéneo, sin fronteras ni apenas barreras culturales o lingüísticas. Para cualquier empresa, conseguir la atención de millones de usuarios es “razonable”, un objetivo bastante obvio a un plazo muy corto. Y, una vez que el producto ha funcionado en un mercado que captura la atención del resto del planeta, el salto es más corto que a la inversa. Cuando lo piensas en serio, te cogen ganas de pegarte con un tronco en la cabeza por empeñarte en montar algo en España.
Hay muchas otras cosas que he aprendido durante estos días, pero creo que por hoy ya te he robado suficiente atención. Pronto, más.
No me extraña que no se leyera tus mails macho, es que a veces eres un poco brasas. Escribes mails infernales e indscifrables a Burton Lee pero olvidas contestar a los que te escriben tus amigos. A ver si un día acabrás también comiendo bravas en el Tomás, tocando boleritos y veraneando en Mallorca con el profesor Lee…
Lecciones aprendidas en Silicon Valley
(El blog de Luis Gosálbez)
http://granadaemprende.blogspot.com/2009/09/lecciones-aprendidas-en-silicon-valley.html
Si tienes pensado lanzar un proyecto a nivel internacional desde cero me interesaría mucho leer tu planificación (si puede saberse, claro)